abelisaurus

Abelisaurus

El Abelisaurus fue un dinosaurio carnívoro y un letal depredador terópodo, que vivió en el territorio de la Patagonia Argentina y Chilena en América del sur, durante el período Cretácico, hace aproximadamente 80 millones de años.

Información: Abelisaurus

  • Género / Especie: Abelisaurus comahuensis
  • Etimología: «Lagarto de Abel», en homenaje a Roberto Abel, la persona que lo descubrió, el cual recibe su nombre de Abel, el hermano bueno de Caín.
  • Localización Global: Patagonia. Argentina y Chile
  • Rango Temporal / Era: Cretácico
  • Estado de conservación: Extinto [EX]
  • Orden: Saurisquios
  • Familia: Abelisauridae
  • Alimentación / Dieta: Carnívoro
  • Altura aprox.: 2 metros
  • Longitud: 7 metros
  • Peso: 1,4 toneladas
  • Hallazgo / Yacimiento: Se descubrió en la formación Anacleto, en la provincia de Río Negro (Argentina).


Desafortunadamente tan solo se hallaron los restos fósiles de parte de un cráneo en el año 1985. Por eso las reconstrucciones de este dinosaurio carnívoro se basan en las estructuras de otros bípedos carnívoros con una cabeza de tamaño similar, por lo que se asumió que Abelisaurus poseía unas patas delgadas y unos miembros delanteros cortos, además de una larga cola para compensar el peso del cráneo.

Características de Abelisaurus

El Abelisaurus fue un primitivo dinosaurio terópodo, que al igual que el Tyrannosaurus era bípedo y carnívoro. El interés de este tiranosaurido reside en que muestra que las criaturas de este tipo probablemente evolucionaron de forma independiente tanto en el Hemisferio Sur como en el Hemisferio Norte.

La principal diferencia entre el Abelisaurus y los tiranosáuridos del Hemisferio Norte es el gran hueco existente frente a sus ojos. Fue uno de los depredadores más feroces de Sudamérica, utilizando su velocidad para abalanzarse sobre los animales vegetarianos, más lentos, y arrancar su carne con sus numerosos dientes.

El Cráneo del Abelisaurus

Este reptil tenía un cráneo enorme en comparación con el resto de su cuerpo. El cráneo que encontró media unos 85 cm de longitud y en su estructura dispone de grandes aberturas en forma de ventana (que reciben su nombre del término latín fenestrae) para reducir su peso.